Sion
Le mardi / el martedì / el martes
El viaje en Sión:
Después del desayuno nos dirijimos a la estación de Nyon. Allí tomamos el tren a Sion. Luego de nuestra llegada, nos encontramos con la guía turistica. Miramos la «Maison Supersaxo», donde aprendimos muchas cosas nuevas interesantes sobre la historia de Sion. Después de la visita pasamos por la casa consistorial, donde vimos muchas puertas históricas. Antes del almuerzo vimos las termales antiguas debajo de la iglesia. Por la tarde hicimos un tour de barco en el lago subterráneo más grande de Europa. Tuvimos algunas horas de tiempo libre para disfrutar, ir de compras o beber un café. Después de una cena rica regresamos al hostel al final de un día pintoresco. Estábamos todos un poco enfadados porque teníamos que levantarnos temprano. Pero el viaje con el tren a Sion duró casi dos horas entonces lo pudimos repasar dormitando. ¡Qué bueno! Luego, a veces fue difícil de seguir la ponencia de la guía. A nosotros los restos debajo de la iglesia nos impactaron mucho. Pero creemos que el lago subterráneo fue la atracción la mas ostentosa. Redondeamos la velada con una cena muy sabrosa en el Hostel Elite. La ville Sion: El martes el 3 de octubre tuvimos una visita a Sion, la capital del cantón Valais. Visitamos dos edificios y las ruinas de las termales romanas. En el primer edificio vimos modelos de la ciudad antigua de Sion y la vivienda de un supersaxo. Supersaxo es un apellido suizo. Esto era divertido porque uno de los supersaxos se ha incluido en la historia de la biblia. Eso muestra que él era muy narcisista. En el segundo edificio el “Hotel de Ville” había un techo y paredes con los tres colores del imperio napoleónico, producto de su ocupación del Valais en el 1798 Los colores no nos gustaron porque no encajan con el resto de la decoración. Afuera había un reloj fascinante porque en este reloj hay un calendario completo incluido Finalmente visitamos las ruinas. Para nosotros esto fue lo más interesante porque eran un poco misteriosas y aprendimos nuevos aspectos sobre los Romanos. Otro aspecto que nos gustó fue la iglesia. Pero no nos gustó que al principio (durante la explicación de los modelos) recibimos demasiadas informaciones y estuvo poco claro. Lac souterrain: Le lac souterrain à Saint Léonard (Valais) est accessible depuis l’année 1949. Mais il a été découvert seulement en 1943 et en 1946 il y a eu un tremblement de terre qui a fait descendre le niveau d’eau et qui l’a fait accessible pour les visiteurs. Le lac fait 260 mètres et la cave fait 300 mètres de longueur. Avec cela, il est le plus grand lac souterrain de l’Europe. Il contient 25 millions litres d’eau potable. L’eau a une température constante de 8 a 10 dégrées et a une profondeur de 1 à 10 mètres. Pendant notre tour guidée en bateau, nous avons appris que le lac avait une légende. Il y a longtemps, les jeunes femmes célibataires venaient au lac au réveillon de Noël pendant la pleine lune. On dit, que cette nuit là, les femmes voyaient le visage de leurs futurs maris dans l’eau. Le guide nous a aussi raconté l’histoire d’une sorcière qui habitait dans la grotte. Il a dit qu’il fallait être très tranquille, sinon la sorcière va se réveiller. Dans le lac il y a aussi des poissons, des truites arc en ciel. C’est les personnes qui ont mis les poissons pour tester la qualité et pureté de l’eau, car ces poissons sont très sensibles à la pollution. L’eau est très claire et propre grâce aux contrôles. Au font de la cave, il y avait deux symboles du Valais. Le guide les a appelées «les deux religions du Valais » : Le vin et la religion catholique. En retournant, il nous a montré des figurines et des formes qui jouent avec l’ombre dans les cailloux, qu’on pouvait reconnaître avec beaucoup d’imagination. Par exemple : King Kong, le visage de la sorcière, la tour Eiffel, le cœur de la cave et un crocodile. Une fois par mois, il y a un concert sur les bateaux. Les quatre bateaux pour les visiteurs sortent sur le lac au même temps pour écouter le concert d’un petit orchestre sur un bateau, car l’acoustique est très bonne dans la cave. Nous avons beaucoup adoré le tour car l’histoire du lac est très intéressante et c’est incroyablement beaux à voir. Les guides étaient très sympa et savaient beaucoup sur la cave. Il nous l’ont raconté d’une manière très drôle et divertissante, facile à comprendre et retenir. Une expérience inoubliable! Rapporte de Sion: Cuando llegamos estaba lloviendo y no pensamos que sería un lindo día. Las nubes estaban acumulándose en las montañas. No había ningun rayo de sol. Era muy triste porque estábamos seguros que la ciudad sería maravillosa cuando el sol brille. En nuestra tristeza miramos a la ciudad con nuestros chaquetas y paraguas. El agua estaba mandando en las calles como ríos en el amazonas. Aunque el tiempo no era lindo encontramos a mucha gente amable. En particular nuestra guía del museo, ella nos dió mucha interés para la antigua ciudad de Sion. Nos fascinaron mucho las puertas con las tallas hermosas. Durante nuestra pausa algunos de nosotros fuimos a ver un autobus autónomo que nos fascinaba mucho. Después nos fuimos a ver un lago subterráneo. Era muy impresionante: la tranquilidad era muy abrumadora. Cuando el guía dije algo se puden oír en todas partes. El guía hacía un ambiente cómico en ayuda de chistes para quitar el ambiente horripilante de la gruta. Cuando salimos la situación de las montañas era totalemente diferente. El tiempo cambió y por fin el sol salió y tomó el paysaje en una luz maravilosa. Las montañas eran oro y el resto de las nubes fueron un imagen impresionante. Estábamos caminado a la estación de tren cuando vimos un señor haciendo vino, lo probamos y reímos porque era muy fuerte. Pero al final el día era un éxito. La cena: El martes comimos en el «Hotel Elite», un restaurante suizo. A las seis y media fuimos al restaurante y nos sentamos en las mesas. Primero las camareras tomaron nuestras órdenes de las bebidas y después las de la comida. Antes de ordenar habíamos jugado «Gemschä» y «Arschlöchlä», juegos interesantes y un poco traviesos. Para comer había la Raclete, el Fondue, filetes del cordero, pescados y orecchiette. No tuvimos bastante tiempo para tomar el postre porque tuvimos que coger el tren a las nueve de la noche. El restaurante nos gustó mucho porque las camareras eran muy amables y la comida era muy rica. Pero no nos gustó no poder tomar el postre. |